Cómo vender en un marketplace: ventajas e inconvenientes

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¿Te has planteado alguna vez vender en un marketplace? ¿Sabes cómo funcionan estos hipermercados virtuales?

Si estás interesado en la respuesta a estas preguntas no dejes de leer este post hasta el final porque creo que te puede echar una mano.

En un marketplace puede vender aquél que ya disponga de una tienda online y quiera ampliar mercado o bien aquél que quiera probar sin mucho riesgo qué es esto del comercio online.

Así que aquí vamos a definir qué es un marketplace, cómo funciona, las razones para vender en un marketplace y, por supuesto, sus ventajas e inconvenientes, que también los tiene.

Te dejo el menú:

¿Qué es un marketplace?

Empezamos.

Un marketplace es un lugar donde compradores y consumidores se reúnen para hacer transacciones comerciales.

Uno vende y otro compra.

Es como una gran superficie comercial pero en un entorno digital.

Todo se hace a través de la gran Red, Internet.

A esta superficie comercial la llamaremos plataforma y en esta plataforma tanto vendedor como comprador permanecerán hasta que la transacción esté completamente finalizada.

Hemos dicho que es una superficie comercial pero no cabe ningún tipo de duda que ofrece toda la flexibilidad de Internet.

Es decir, es una plataforma que está abierta los 365 días del año y las 24 horas del día.

Es de esfera planetaria. Se pueden hacer compras desde cualquier punto del planeta a un comerciante situado en cualquiera de los cinco continentes.

De marketaplaces hay muchos y de muy variados tipos pero para poner el ejemplo que todo el mundo tiene en boca podemos hablar de Amazon. Es la representación máxima de un marketplace. 

Estas plataformas disponen habitualmente de un gran catálogo y en ellas se pueden encontrar artículos de lo más variado.

Desde todo tipo de bienes hasta productos intangibles. Desde un jersey de punto hasta un código fuente. Productos y servicios.

Todo se puede vender y comprar en este centro comercial virtual.

Y este mismo centro comercial es la garantía de que nadie resulte perjudicado ni estafado. Por tanto es una garantía tanto para vendedores como consumidores.

Cómo funcionan los marketplace

Es sencillo. Tan sólo tienes que acceder al marketplace que hayas elegido para vender tus productos y crearte una cuenta de vendedor.

Dependiendo de las plataformas tendrás acceso a una cuenta de vendedor profesional o vendedor individual.

Una vez cumplimentada toda la información y haberte registrado puedes cargar el producto bien desde tu tienda online o bien a través de los ficheros que ponen a tu disposición las diferentes plataformas.

Para enviar tus pedidos a tus clientes o bien puedes hacerlo por tu cuenta o requerir los servicios de logística de los marketplace.

En este punto hay que leerse bien las condiciones de utilizar estos servicios o si enviarlos por tu cuenta te sale más rentable.

Después de vender tus productos viene el momento del cobro. Lo lógico es que recibas transferencias bancarias mensuales con el importe vendido ya descontadas las comisiones que se le han de pagar a las plataformas.

Atención a las comisiones. Debes fijarte bien en este punto y calcular si estar presente en una de estas plataformas te es rentable.

Vender en un marketplace

¿Por qué vender en un marketplace?

La primera razón ya la hemos apuntado. Es un lugar magnífico para familiarizarse con el comercio electrónico.

No son pocos los pequeños comerciantes que han empezado por vender en un marketplace y han acabado teniendo un magnífico negocio online.

Estar en una de estas plataformas es también muy beneficioso porque es un gran canal de distribución de todo tipo de productos. De ese canal de distribución también se pueden beneficiar los pequeños comerciantes.

Y lo más importante quizá sea que la plataforma le garantiza el pago al que vende y le asegura la entrega de producto al comprador.

Por tanto, todo el mundo resulta beneficiado de pertenecer a alguna de las muchas plataformas de comercio electrónico que existen en la actualidad.

Ventajas  y desventajas de vender en un marketplace

Lo primero que a mucha gente se le viene a la cabeza cuando quiere vender en Internet es hacerlo a través de una de estas plataformas.

Es más, son muchos también los que después de crearse una tienda online son conscientes de la necesidad de vender en un marketplace para intentar aumentar sus ventas y por tanto sus ingresos y alcanzar una mayor cuota de mercado.

De todas formas, y a pesar de las ventajas que se intuyen también puede haber desventajas. Pero primero vamos a echarle un vistazo a las ventajas:

Ventajas

1.      Venderás más

Si ya tienes abierta una tienda online seguro que ya sabes que los comienzos no son nada sencillos, máxime si no estás familiarizado con diferentes estrategias de marketing online.

El tiempo que transcurre desde la inauguración del Ecommerce hasta vender de una manera fluida varía, según la inversión y el esfuerzo realizado, entre los 12 y los 36 meses.

En primer lugar hay que realizar un estudio de palabras claves, decidirse en qué plataforma montar la tienda online, familiarizarse con las distintas campañas de pago y el e-mail marketing y dominar las distintas redes sociales que puedan ser más interesantes en tu sector.

No está de más contar con buenos profesionales del marketing y con redactores freelance que te aporten contenido fresco, único y original.

Y así y todo la cantidad de visitas que llega hasta tu comercio electrónico crece de manera muy lenta. Por lo tanto es normal sentirse atraído por el gran tráfico que tienen los marketplace.

 Ya se sabe que el tráfico es la antesala de la visita a una tienda online y ésta a su vez la antesala de su venta. Por tanto es normal que los pequeños comerciantes se sientan atraídos por la luz que emiten los marketplace.

En el mundo físico ocurre otro tanto. Hay muchos pequeños comerciantes que tienen su tienda de barrio pero no dejan de montar otra en grandes centros comerciales para aprovecharse del flujo de visitantes que por ellos transitan diariamente.

Por tanto, si todo se hace correctamente dentro de un marketplace es muy posible que aumentes tus ventas en un corto periodo de tiempo.

Desde luego mucho más corto que si montas una tienda online. Hay muchos comerciantes que han visto aumentar sus ingresos en un cincuenta por ciento después de decidirse a vender en el gigante Amazon.

2.      Reducirás costes

Muchas de estas plataformas te permiten que sólo tengas que ocuparte del contenido y, claro, del producto.

La plataforma se encarga de la logística, es decir, de repartir por ti el producto. También aloja en un hosting tu tienda online si está dentro del marketplace.

Tampoco tendrás que preocuparte por las técnicas de posicionamiento en buscadores, el SEO. También el marketplace lo hará por ti.

Y tampoco por las campañas de publicidad.

En definitiva, tú tan sólo tendrás que tener un buen producto, gestionar tu catálogo y estar pendiente de los pedidos que recibas.

Eso sí. Todo lo que vendas estará sujeto a una comisión que le deberás abonar a la plataforma. Y aquí es donde tienes que ver si, según tu producto te interesa vender aquí o no.

Si los números no te salen puedes dejar de vender en cualquier momento y no hay que preocuparse porque estas plataformas no suelen penalizar a quienes abandonan su “hipermercado virtual”.

Un consejo que te damos es que aunque prácticamente el marketplace se ocupa de todo no está de más que vayas adquiriendo conocimientos sobre todas las estrategias de marketing online porque de esta manera podrás leer e interpretar los resultados y serás capaz de ver a simple vista qué funciona y qué no.

3.      Mantienes el nombre de tu marca

Dentro de este supermercado a escala mundial la plataforma no te va a pedir que renuncies al nombre de tu marca y tus logos. Estás considerado como un vendedor profesional a todos los efectos.

De esta forma, los clientes que entren a esta plataforma también te ven como un negocio independiente.

Además, podrán comprarte o bien desde el marketplace o acudir a tu tienda online.

También podrás decirles a tus clientes tus valores añadidos y tu experiencia lo que va a suponer, evidentemente, otra ventaja competitiva.

Eso sí. Debes procurar que los precios en tu tienda online sean los mismos que en el marketplace para no crear equívocos.

4.      Generarás confianza

El supermercado virtual también se encarga del proceso de compra. Este proceso es uno de los más delicados y es aquí donde muchas personas abandonan el carrito de la compra, reticentes a dejarle el número de su tarjeta de crédito a un desconocido.

Los procesos de compra de estas plataformas ofrecen mucha seguridad a ojos de tus futuros clientes. 

No se nos puede escapar que cuentan con equipos informáticos a prueba de ataques de los piratas. Por último también es bueno que sepas que se hacen cargo de los posibles fraudes por parte de compradores desaprensivos.

Si eres comerciante online y estás dentro de una plataforma también estás cubierto respecto a esta desconfianza.

5.      Podrás vender en el exterior

Un comerciante online particular puede desear vender a otros países. Pero el primer problema con el que se encuentra es que los gastos de envío son prácticamente una barrera imposible de superar.

Con el marketplace esto es mucho más sencillo. Otro de los factores que frenan a la mayoría de propietarios de tiendas online a vender fuera de sus fronteras es el hecho de que se han de traducir ellos mismos sus páginas.

Este es otro coste fuera del alcance de muchos ya que se necesita contar con una persona que domine el idioma del país al que se desea vender. Esta traducción la realizan los marketplace sin que tú tengas que preocuparte de nada.

El esfuerzo y la inversión que has de realizar como particular no tiene nada que ver si entras a formar parte de un marketplace.

Desventajas

1.      No son tus clientes

Los clientes que te compren en el marketplace no te pertenecen.

Desgraciadamente es así. Son del propietario del marketplace y tú no puedes hacer uso de sus datos.

No vas a encontrar la manera de descargarlas en un excel. No los puedes exportar.

Como hemos dicho al principio, los marketplace son perfectos si un comerciante no tiene experiencia en el mundo online y quiere empezar a vender por Internet.

Un canal, por cierto, que cada vez más se ha de tener en cuenta. Es una manera de familiarizarse en el sector del Ecommerce.

Pero imagina que te pones en tu marketplace y que la cosa va realmente bien. Y has decidido ¿por qué no? el crearte tu propia tienda online. Tendrás que empezar de 0. Los clientes que has hecho en el hipermercado virtual se quedan ahí. No te los podrás exportar.

Existe otro inconveniente. Como no tienes posibilidad de crear una base de datos, tampoco puedes hacer acciones de e-mail marketing. Y es una pena porque a través de los correos electrónicos también se consiguen muchas ventas.

De todas formas, y a pesar de esta desventaja, si los números te salen continúa en el marketplace y monta tu propia tienda online.

Son dos canales de venta diferente y tendrás más oportunidad de aumentar tus ingresos.

2.      Es una tienda de alquiler

Los gestores de los marketplace te dejan un pequeño espacio dentro de su plataforma. Es como si alquilaras una tienda online pero nunca es tuya.

Es cierto que de esta manera tú no tendrás que pagar un alojamiento, ni invertir un euro en diferentes tácticas de SEO y de marketing online, pero el “local” es de ellos.

Así que si un día te cansas y decides cambiar o bien de marketplace o montar tu propio negocio virtual tendrás que volver a poner todos y cada uno de tus productos con sus descripciones, fotos, et…

Además, en el caso de crear tu propio Ecommerce deberás pagar un hosting y elaborar todas las estrategias para promocionarlo.

3.      Tu competencia también está muy visible

Tú estás vendiendo en un marketplace pero no estás sólo. Cuando un cliente clique buscando un determinado producto aparecerás tú en esas búsquedas pero también tu competencia.

¿Qué queremos decir con esto? Pues que has de afinar mucho en las descripciones de tu producto y también en el precio.

Has de hacerle ver en milésimas de segundo a tu cliente porque te tiene que comprar a ti y no a la competencia.

Lo mejor que puedes hacer es dejar bien claro tu valor diferencial.

El valor añadido que tú puedes ofrecerle a tu cliente y que no tiene la competencia. Así que una de tus labores diarias ha de ser ver cómo se mueven tus competidores para no perder cuota de mercado.

4.      No puedes despistarte lo más mínimo

Tienes que estar siempre atento. Las directrices de los marketplace también son muy severas porque sus gestores también tienen una marca que defender, la de su supermercado virtual.

Así que no toleran incumplimientos. No toleran, por ejemplo, que no le entregues al cliente la mercancía en el momento pactado.

Te exigirán ciertos parámetros de calidad que debes ser capaz de cumplir. Y si no lo haces, te expulsarán. Así que no puedes relajarte ni lo más mínimo si tu intención es vender a través de estas plataformas.

¿Quién puede vender?

¿Quién puede vender? Todo el mundo. O casi.

Las plataformas pueden poner ciertas restricciones. Por ejemplo, Amazon no permite la venta de fruta y verdura fresca.

No hay otra razón que el gigante de Jeff Bezos quiere implantar su propia línea de distribución de este producto en todo el mundo.

Pero salvo algunas excepciones como las que acabamos de comentar todo se puede vender y comprar dentro de una serie de normas éticas.

El marketplace también es un lugar muy indicado para aquellos comerciantes que no tienen los suficientes recursos todavía para montar su propia tienda online.

Por un módico precio pueden vender sus productos en Internet e ir familiarizándose con el sector del comercio electrónico.

Por cierto, que el sector del comercio electrónico es uno de los pocos sectores económicos junto con el turismo que aumenta su facturación año tras año y las previsiones apuntan que en los próximos continuará creciendo.

Dos tipos de marketplace

Para el comerciante que quiere vender en una de estas plataformas es conveniente saber que existen dos tipos de marketplace.

Nos estamos refiriendo al generador de pedidos y al generador de leads.

Para el usuario final no es importante esta diferencia porque su proceso de comprar será exactamente igual. Vamos a explicarlos:

1.     Generador de pedidos

Es el sistema más común y el que se emplea en la mayoría de estas plataformas virtuales. El objetivo es que se reúnan cientos de comerciantes para vender miles y miles de productos en un mismo lugar. Cuando un cliente compra paga en un carrito único que es propiedad del marketplace. No es el comerciante el que cobra, aunque evidentemente recibirá la pertinente comisión. La plataforma también es la encargada de generar tráfico hacia la tienda del comerciante particular

2.     Generador de Leads

En este sistema también se reúnen cientos de comerciantes y millones de productos. La diferencia estriba que cuando el cliente cierra el pedido se le envía a la pasarela de pago del comerciante. Es el comerciante quien cierra la transacción. En este caso, el comerciante le tendrá que abonar una comisión al marketplace por la operación realizada.

Requisitos para vender

Los requisitos para vender son los siguientes:

  • Disponer de una tarjeta de crédito
  • Un número de teléfono
  • Los datos de tu empresa
  • Datos de la persona de contacto
  • Datos de los dueños de la empresa a la que representas
  • Tus datos bancarios

¿Puede vender un particular en un marketplace?

A tenor de los datos que acabamos de enumerar, puede surgir la siguiente pregunta: ¿Puede vender en un marketplace un particular? ¿Cuáles son las ventajas y las desventajas?

La respuesta a la primera pregunta es que no. Que al menos, para vender en las grandes plataformas has de ser autónomo. Es la única manera de vender en la legalidad. Todas las ventas que se realicen están sujetas a impuestos. No es nada conveniente, repetimos, no es nada conveniente lanzarte  a vender en “B”. Las consecuencias con Hacienda pueden ser demoledoras.

En España, hacerse autónomo no cuesta ningún trabajo salvo la obligada visita a las distintas administraciones, incluida el Instituto Nacional de la Seguridad Social.

Ser autónomo o freelance y lanzarte a vender también conlleva sus riesgos. Si el negocio no funciona como se esperaba el autónomo ha de responder con su patrimonio de las diferentes deudas.

Lo que queda claro es que tanto una empresa legalmente establecida como un autónomo pueden vender en estas plataformas. Las configuraciones de las diferentes plataformas lo permiten. Pero nadie está exento de cumplir con sus obligaciones fiscales.

¿Estás vendiendo en un marketplace? ¿Qué tal te va? ¿Me cuentas tu experiencia en la sección de comentarios?

¿Te ha gustado lo que te he contado en este post? Si tu respuesta es que si, ¿lo compartes por tus redes sociales?

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